- El proyecto educativo, que tendrá continuidad, se ha realizado en cinco centros escolares de Santa Cruz
El acto ha tenido lugar en el CEIP San Andrés y ha contado con la presencia del director insular de Medio Natural, Pedro Millán; la responsable de fundación Moeve en Canarias, Belén Machado; el presidente de la Fundación Ataretaco, Pedro Armas, y los concejales Carlos Tarife y Gladys de León del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.
Pedro Millán mostró su satisfacción por esta iniciativa “que es pionera y que ha permitido sensibilizar y concienciar a un millar de escolares de Santa Cruz sobre la importancia de recoger el aceite que usan en sus casas para evitar la contaminación y convertirlo en un producto aprovechable. Esperamos crear una verdadera red de compromiso y, para eso, ya estamos trabajando en la segunda edición, que queremos que llegue a una docena de centros escolares”.
Por su parte, Belén Machado agradeció “el compromiso de los cinco centros escolares participantes”, así como, en especial, “a los 79 agentes sensibilizantes, alumnos que han tenido un papel clave porque no solo aprendieron a cuidar el medio ambiente, sino que se convirtieron en líderes dentro de su colegio, animando e inspirando a sus compañeros a hacer las cosas de manera diferente”.
“Hoy han recibido un diploma que es, además de un reconocimiento, un distintivo de que son agentes de transformación para un futuro más sostenible. Estoy segura de que lo que han aprendido les ayudará a inspirar, también, a sus familias y vecinos”, indicó la responsable de fundación Moeve en Canarias, al tiempo que resaltó que el número de alumnos participantes y de aceite recogido hasta el momento solo son cifras, sino el reflejo del impacto positivo ambiental y social de este proyecto”.
La primera edición del proyecto ‘Aceite Separado, Recurso Aprovechado’ se ha desarrollado en los centros educativos Colegio Santa Catalina de Siena FESD; CEIP Isabel La Católica; CEIP Tincer; CEIP San Andrés y CEIP Bethencourt y Molina de Santa Cruz y ha contado con la partición de 1.013 escolares, quienes han evitado el vertido a los desagües de unos 40 litros de aceite usado de cocina. El proyecto, además, incide en la generación de empleo inclusivo y verde al posibilitar la contratación de personal en situación de exclusión social por parte de la Fundación Ataretaco y sus empresas.
Esta acción educativa fomenta el compromiso con la sostenibilidad y la educación ambiental y tiene como objetivo principal concienciar y sensibilizar al alumnado sobre la importancia de una correcta gestión de residuos, y en concreto, el correcto el proceso de recogida de dicho recurso para su posterior valorización como biocombustible.
Dentro de las acciones, se han realizado talleres de sensibilización al alumnado de 4º y 5º de primaria, así como la formación de ‘Agentes Sensibilizantes’ que han actuado en sus centros como embajadores ambientales promoviendo prácticas sostenibles en relación a la recogida de aceite de uso doméstico.
Durante el proyecto se dotó a cada centro educativo de los contenedores y embudos necesarios para la recogida del aceite. Además, se realizaron diferentes tareas de información, capacitación, educación y sensibilización ambiental al alumnado de los centros, sobre cómo recoger y porqué reciclar el aceite usado de cocina y una labor de seguimiento y acompañamiento junto con el profesorado. Además, se han impartido conocimientos prácticos, como que 1 litro de aceite puede contaminar hasta 1.000 litros de agua y que con una correcta separación y procesado se pueden obtener otros recursos como jabones o combustibles, que generan menor cantidad de CO2.
A través del proyecto ‘Aceite Separado, Recurso Aprovechado’ se anima a los participantes a tomar medidas responsables en sus hogares y comunidades. Este enfoque educativo no solo beneficia al medio ambiente, sino que también inculca valores de responsabilidad y respeto por la naturaleza.